Artritis reumatoide: ¿cuáles son sus causas?
Publicado el jueves, 07 de marzo de 2024 a las 08:34
La artritis reumatoide es una enfermedad crónica caracterizada por la hinchazón, dolor y rigidez articular que acaba derivando en la pérdida de función de la articulación.
Se trata de un trastorno autoinmunitario ya que el sistema inmune ataca los tejidos sanos de las articulaciones debido a su hiperactividad.
Síntomas
Se caracteriza por la fluctuación de la actividad de la enfermedad. Los pacientes con artritis reumatoide presentan fases de remisión en los cuales la enfermedad se estabiliza y fases de relapso o brotes en los cuales la sintomatología empeora.
Entre la sintomatología característica de la enfermedad destaca:
- Hinchazón, dolor articular tanto en reposo como en movimiento
- Fatiga y falta de energía
- Pérdida funcional de las articulaciones
- Rigidez articular especialmente notable por las mañanas
- Pérdida de apetito
- La inflamación puede ser sistemática, afectando también a la piel, ojos, pulmones, corazón y vasos sanguíneos, entre otros órganos y tejidos.
Puede afectar a diversas articulaciones, pero las más frecuentes son las manos, muñecas y pies.
Causas de la artritis reumatoide
Es una afección compleja y multifactorial cuyas causas exactas aún se investigan, aunque se reconoce que intervienen factores genéticos, ambientales e inmunológicos.
- Edad: la mayoría de los casos se dan a mediana edad, pero no es una enfermedad exclusiva de esta franja de edad.
- Sexo: la prevalencia de la enfermedad es mayor en mujeres (aproximadamente 0.8%) que en hombres (cerca del 0.2%) en personas mayores de 20 años.
- Tabaquismo: el tabaco es considerado un factor de riesgo, especialmente si tienes una predisposición genética a desarrollar artritis reumatoide.
- Obesidad: no solo es un factor de riesgo, sino que puede limitar la mejoría de la enfermedad.
- Virus: en ocasiones, determinadas infecciones víricas pueden desencadenar la enfermedad.
- Estrés: no solo se encuentra entre los factores de riesgo, sino que puede influir en la respuesta inflamatoria del cuerpo, empeorando los síntomas.
- Genética: la genética puede aumentar las probabilidades de que tu sistema inmune reaccione a la exposición de diversos factores ambientales. Es por ello que, aunque la genética no determina la presencia o ausencia de esta enfermedad, sí puede predisponerte en mayor o menor medida a desarrollarla.